Escrito por Redacción 4DIARIO
octubre 13, 2025

Este lunes, la Justicia cerró la etapa de investigación penal preparatoria contra Renzo Esquivel, el hombre acusado de atacar a cuchillazos a su pareja en marzo pasado, en un violento episodio ocurrido en el barrio Los Pinos, en Chimbas.
Con la investigación finalizada, el fiscal Mario Panetta presentó la acusación formal y solicitó la elevación a juicio, pedido que fue autorizado por el juez de Garantías Mariano Carrera.
Durante la audiencia, Fiscalía mantuvo la imputación por tentativa de homicidio agravado por el vínculo y por mediar violencia de género, además del delito de amenazas agravadas, y anticipó que en el debate oral pedirá 13 años de prisión efectiva para Esquivel.
Por su parte, la defensora oficial Sandra Leveque pidió una carátula menos gravosa, alegando que el acusado se defendió de una agresión previa de su pareja, y propuso medidas orientadas a su reinserción social.
El propio Esquivel tomó la palabra, reconoció haber herido a su ex pareja pero insistió en que actuó en defensa propia, se mostró “arrepentido” y consideró “excesiva” la pena que pretende el Ministerio Público Fiscal.
Ante la falta de acuerdo entre las partes, el juez Carrera dio por cerrada la etapa investigativa y ordenó la elevación a juicio.
Ahora resta el sorteo del Tribunal que intervendrá y la definición de la fecha de inicio del debate.
La polémica declaración del acusado
Durante la primera audiencia de formalización, realizada dos días después del ataque, Esquivel intentó responsabilizar a la víctima de lo ocurrido.
Aseguró que la mujer había salido la noche anterior, dejándolo solo con los hijos, y que regresó a la madrugada “en presunto estado de ebriedad”.
Según su versión, fue ella quien lo agredió primero y él “solo se defendió”, aunque admitió haber perdido el control.
“Ella me empezó a insultar y agredir. Yo agarré un cuchillo porque ella había tomado otro y se me abalanzó. Después no recuerdo, tuve un ataque de ira. Volví en mí cuando llegó la Policía”, declaró Esquivel en aquella audiencia.
Tras ese primer encuentro judicial, el juez dispuso cuatro meses de investigación y prisión preventiva por el mismo tiempo en el Servicio Penitenciario Provincial, medida que se mantuvo vigente hasta el cierre de la causa.